El avance de la digitalización exige elevados requisitos de disponibilidad de las instalaciones y servicios. Uno de los ejemplos es el estándar de radiotelefonía móvil 5G, que debe poder funcionar de forma continua y sin errores. Un error en la conexión o una interrupción puede provocar fallas y generar altos costos en el proceso de producción. Y los peligros serían aún mayores si se produjera una falla de red en aplicaciones del futuro como, por ejemplo, los vehículos interconectados o la conducción autónoma.
Uno de los aspectos del aumento de la disponibilidad es la estructura redundante de las partes sensibles de la instalación. No obstante, resulta claramente más importante el empleo de protección contra sobretensiones. En este sentido, la digitalización juega un papel esencial, ya que la protección de los componentes sensibles de los sistemas de control, las fuentes de alimentación y las interfaces es cada vez más exigente.
El caso de Telefónica Alemania
Telefónica Deutschland GmbH es uno de los principales proveedores en el ámbito de las telecomunicaciones y la telefonía tanto móvil como fija en Alemania. Actualmente, la empresa está digitalizando sus plantas y preparando su equipamiento para el futuro. Con esta digitalización, supervisará, controlará y automatizará muchos más parámetros de la planta de los que controla hoy en día.
“El reto inmediato es el 5G, la digitalización y la conducción autónoma y en red, es decir, la serie completa de aplicaciones interesantes que se nos presentan”, describe Oliver Tananow, Senior Specialist Electrical Engineering Core Site, Telefónica Alemania.
Al tratarse de infraestructuras críticas, el éxito depende de que no se produzcan fallas. Por eso, instalaron ImpulseCheck en su planta de Berlín.
“Nuestro socio Phoenix Contact se puso en contacto con nosotros con motivo de la introducción en el mercado de ImpulseCheck. No les costó demasiado convencernos, ya que nos gustó el concepto de ImpulseCheck. Con este producto, podemos evaluar otros puntos de datos y utilizar la información para un mantenimiento preventivo”, valora el ingeniero eléctrico.
Para que un centro de datos funcione de forma absolutamente fiable resulta imprescindible la protección contra sobretensiones.
“Las sobretensiones pueden penetrar en la aplicación por muchas vías y la consecuencia pueden ser daños importantes. No solo se trata de los daños en el equipamiento eléctrico, sino también de todas las averías que pueden provocar un fallo temporal de la instalación. Con este amplio concepto de protección contra sobretensiones para todas las líneas de alimentación eléctricas se pueden evitar fallos y daños”, explica el Dr. Martin Wetter, Executive Vice President Innovation BA ICE de Phoenix Contact.
Todos los sistemas de alimentación de energía pertinentes, como la alimentación del transformador, la alimentación principal de baja tensión, los sistemas de reserva, así como todas las estructuras por cable que se alimentan en el centro de datos, están protegidos como puntos neurálgicos con protección contra sobretensiones.
Los sistemas de intercambio de calor para la climatización del centro de datos, así como los sistemas de climatización de las instalaciones, también incluyen protección contra sobretensiones y, por lo tanto, contra los efectos transitorios.
“En nuestra instalación, ImpulseCheck tiene la tarea adicional de supervisar si se producen sobretensiones en nuestro sistema y también en los dispositivos de protección contra sobretensiones. Esto nos permite ver inmediatamente los fallos y podemos reaccionar a tiempo, garantizando así la disponibilidad de la infraestructura crítica”, describe Robert Krüger, Senior Specialist IT Core Site de Telefónica Alemania.
El especialista de Telefónica valora además que “una ventaja de ImpulseCheck es que se puede integrar en la supervisión existente de la infraestructura. De esta forma, se pueden registrar, evaluar y supervisar a largo plazo los eventos transitorios que se producen en la planta en toda la tecnología”.
Otro de los retos del siguiente proyecto piloto fue una planta de radiotelefonía móvil clásica con una antena de telefonía móvil de 60 m de altura. “Mediante el uso de ImpulseCheck, esperamos poder calcular en el futuro la distribución de la corriente de rayo en caso tormenta”, declara Oliver Tananow.
El enfoque basado en la nube de ImpulseCheck hace que los datos que recopila el controlador en las instalaciones de Telefónica se envíen a la nube, donde se aplican diferentes algoritmos que Phoenix Contact continúa desarrollando de manera continua. En el segundo paso, el controlador vuelve a la nube, toma los datos evaluados y los presenta localmente. Esto resulta ventajoso para Phoenix Contact y el desarrollo continuo de su producto, mientras que, para Telefónica, la solución es el mantenimiento preventivo.
“Supongo que en el futuro continuaremos con nuestra excelente colaboración, que nos ha permitido trabajar hasta ahora como un equipo”, valora finalmente el Ingeniero Eléctrico Oliver Tananow.